

Santiago Rodríguez Quílez
En mi vida, haber trabajado en la restauración de “La Pedrera” ha sido la clave que ayuda a sostener mi mundo. No por lo que hice, si no por lo que ví.
Pasear por los pasillos, ver los techos, las manivelas y tiradores, puertas, las paredes y pilares.
Gaudí no hacía metros de obra, creaba sensaciones, le daba un valor extra a cada detalle y había una razón para esas curvas.
Cada material tiene sus características y posibilidades, madera, piedra, hierro…
Cada madera es buena para un trabajo y para los demás puede valer.
Pasa lo mismo con piedra, metales…
Tratar de saber el porqué de cada proceso y material ayuda a crear piezas que no se pueden definir con planta y alzado; el punto de vista y la imagen cambian según quien la ve y desde dónde.
Cada pieza empieza conociendo al cliente, sus gustos han de definir la forma, dar sentido a su obra.
Trato de ser su herramienta, que participe de cada parte.
Al ver el resultado, miran dando una vuelta, se acercan, acarician, han participado en la creación y están tan orgullosos como yo.
Serie Petra (Septiembre 2017)
Torneado, caliza.
Colaboración con el diseñador Javier Díez, diseñador de la colección. Fue finalista en la segunda edición de los Premios Nacionales de Artesanía.
Bolardo 20 cm diámetro y 70 de altura.
Asiento 45 de altura y 40 cm de diámetro.
Banco 45 cm de altura, 140 longitud y 40 cm de ancho.